Casi todos los días hago el mismo recorrido desde dónde aparco el coche hasta la oficina. Y vuelta. Cuando voy me suelo cruzar con muchos escolares, solos o acompañados de sus madres (a veces sus padres), vestidos de uniforme. Hay varios colegios privados en la zona. Algunos ya me son conocidos.
Pero hay una persona que me encuentro tanto a la ida como a la vuelta. Es muy bajita, lleva el pelo corto. Tiene el cutis de una mujer ya mayor, pero viste con vaqueros, cazadoras de cuero y siempre lleva una mochila. Anda a buen paso, con unos auriculares en las orejas.
Llevo cruzándome con ella varios meses, dos veces al día. Últimamente me la quedo mirando sonriendo, a ver si me saluda con la cabeza o algo, como si fuésemos vecinas del mismo edificio que siempre coinciden en el ascensor, o en el aparcamiento. Pero no, de momento no me saluda.
Hace ya varios días que no la veo. Igual ha pillado un catarrillo o algo. Espero que se recupere pronto.
Pero hay una persona que me encuentro tanto a la ida como a la vuelta. Es muy bajita, lleva el pelo corto. Tiene el cutis de una mujer ya mayor, pero viste con vaqueros, cazadoras de cuero y siempre lleva una mochila. Anda a buen paso, con unos auriculares en las orejas.
Llevo cruzándome con ella varios meses, dos veces al día. Últimamente me la quedo mirando sonriendo, a ver si me saluda con la cabeza o algo, como si fuésemos vecinas del mismo edificio que siempre coinciden en el ascensor, o en el aparcamiento. Pero no, de momento no me saluda.
Hace ya varios días que no la veo. Igual ha pillado un catarrillo o algo. Espero que se recupere pronto.
3 comentarios:
Es curioso, en Alicante todos los días me cruzaba con una señora en traje de baño y con gorro de baño. Si, en invierno iba más tapada y en verano menos, pero el gorro de plástico antiguo con flores incrustadas siempre lo llevaba. Era una señora muy pequeña y encorvada pero siempre iba a conjunto. El gorro rosa, la toalla rosa, el gorro amarillo, el bolso y el pareo amarillo. Un día dejé de verla y me preocupé, se lo comenté a mi peluquera y me dijo que no la conocía en persona, pero que también la veía todos los días. Igual estaba enferma ...
Ahora ya no vivo allí.
¿Iba con gorro de baño por la calle? ¡Qué caña! Bueno, al menos iba conjuntada :)
Hoy he visto otra vez a mi señora conocida (me ha hecho ilusión ver que no le ha pasado nada). En vez de vaqueros llevaba una falda larga, botas de ante y una cazadora acolchada. Viste mucho mejor que yo. Y sigue sin saludarme.
Fíjate si lleva pendientes de perla.
Si es así no te devolverá nunca el saludo.
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